En el imaginario musical del pop, podemos encontrar bandas y solistas de todo tipo, como los que resisten con una sola canción o los que siempre se han mantenido en la picota por insistencia (este último grupo no deja de generar harta confusión a cuenta de la tendencia de estación), pero hay proyectos que se distinguen mediante una transmisión especial: forman su referencialidad a su propio ritmo, construyendo una serie de temas que encuentran a sus oyentes sin los apuros de temporada. Esa quizá sea la mayor legitimidad, que se traduce en seguidores no dependientes del respectivo arco generacional.
Esta es una manera legítima de acceder a lo que pocos: la categoría de culto, que como tal, no debe ser ajeno a la algarabía de la multitud, porque se puede ser de culto y a la vez tremendamente popular, pero no cualquiera puede acceder a esta categoría. Ese es el caso de la banda británica The Kooks, que este martes 24 de mayo se presentará en el Arena 1 Costa Verde, en el marco de su gira mundial Inside In/Inside Out, con la que celebran los 15 años de su homónimo primer álbum.

“Las personas, en muchos países, han manifestado su gusto por este primer trabajo de la banda. Nos alegra que nuestras canciones hayan formado una especie de comunidad con las canciones de The Kooks, en especial de este primer álbum que sigue vigente gracias a ellos”, declara para CARETAS Hugh Harris, el guitarrista de la banda, la misma que, para más señas, tocará por primera vez en Perú.
En tal sentido, resulta imposible no preguntarle a Harris sobre las inmediatas impresiones que tiene de Perú.
“Perú es un país con mucha historia. Considero que los peruanos deben estar muy complacidos por la cultura que tienen, por su conexión con su tierra, y eso es hace que sea un pueblo especial, poderoso en conjunto, esto es lo que percibo desde fuera y esperamos poder sentir ese poder —digamos emocional— en el concierto”.
Como artista y músico, Harris tampoco es ajeno a las crisis que vienen acaeciendo hoy en día en el mundo. Por ello, más de uno se ha llegado a preguntar qué función tendría la música en este contexto más allá de su representación estética.
“La música es una salida a estos momentos muy duros. Si la música tiene una función, esta podría ser la de unir a las personas, la música puede consolar en momentos tan difíciles. Lo demás obedece a lo que los políticos decidan. Es complicado. La música es más íntima, para uno mismo”.

Pregunta difícil para todo músico, que Harris responde sin dudar en cuanto a la canción que le gusta más de The Kooks:
“Me gustan muchas canciones de The Kooks, pero pienso en “Time Above the Earth”, porque estuve involucrado en su escritura y porque a la vez fue también un proceso experimental y personal bastante especial. A mí me gusta la música clásica, la belleza de su sonido. Soy muy seguidor de compositores de inicios del siglo XX, como Erik Satie y Claude Debussy, la música clásica es inherente a mi vida”, enfatiza Harris, que no por nada está considerado como “la armonía” de The Kooks”.