El fotoperiodista español Juanjo Fernández continúa con su cruzada de llevar libros a lugares en los que nunca ha habido uno. Hace unas semanas, llegó a la localidad de Montecalvario, en el río Pintuyacu en Loreto.
“Aquí no llega el Internet, ni el teléfono”, dice Juanjo, que comenzó esta obra en el 2018 y a la que llama “La Cocha de los Libros”.
Esta nueva biblioteca la instaló con la ONG Suyay, que trabaja en proyectos de educación para adultos en el alto Nanay. En las redes sociales de las zonas, la noticia se dio a conocer cuando Juanjo subrayó que “los libros serán una gran compañía para las 21 familias que habitan la comunidad, y para todos sus niños y niñas y los vecinos de Saboya y Salvatierra que van a estudiar con los amigos de ESAI”.
Fernández comenzó este proyecto en Saramurillo, lugar que fue muy golpeado por el derrame de petróleo y donde los niños prácticamente no conocían qué era un libro. Después instaló otra biblioteca en la localidad loretana Cuninico. También ha donado libros al Asentamiento Humano Virgen de Candelaria en Villa María del Triunfo, a los penales de Castro Castro y Ancón 2, la escuela de arte Purawa en Puerto Miguel, ubicada en la quebrada Yarapa junto al Ucayali.
Si hay una palabra para definir esta labor de Juanjo Fernández, esta sería la de incansable. Que su ejemplo sirva de motivación para todos que quieran llevar a cabo proyectos similares.