Esta historia se repite una y otra vez, en el mismo canal, en el mismo programa e incluso en las mismas circunstancias y, al parecer, a los directivos de América Televisión no les da ni la tos.
2004: El equipo de periodistas de Cuarto Poder, renunció tras un enfrentamiento de Carlos Espá, en ese momento conductor del espacio, con el presidente Alejandro Toledo, entonces candidato presidencial, después de emitir un video en el que se lo veía celebrando “un trabajo exigente, concienzudo, desde las personas que han transcrito, digitado, y rechequeado (las firmas)”, dando a entender que su partido había falsificado firmas para inscribirse en la elección del 2000.
Tras la emisión del video, Toledo llamó a Espá para recriminarle, en vivo, por no haberle solicitado antes su versión y acusó al programa de realizar un “periodismo canallesco” y lo calificó de “cobarde”. Al día siguiente, el diario El Comercio, dijo en su editorial que la denuncia del programa televisivo “fue insuficiente”, por lo que el equipo en pleno, con Roxana Cueva, directora del espacio, a la cabeza, presentó su carta de renuncia ya que no se sintieron respaldados. “Nuestros cargos son de confianza y cuando perdemos la confianza del canal, tenemos que renunciar”, dijo Espá en aquella ocasión.
2011: Laura Puertas, directora de prensa de América Televisión fue despedida en medio de una coyuntura electoral que se disputaba en ese entonces y que era muy parecida a la de ahora. La periodista estaba en la mira de algunos directivos durante la campaña por haber ‘humanizado’ al entonces candidato, Ollanta Humala, quien ganó las elecciones y se convirtió en Presidente.
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En un acto de solidaridad varios periodistas, entre ellos Hugo Coya y Raúl Tola renunciaron. Antes, ya habían cancelado el programa Prensa Libre, no renovando el contrato de Rosa María Palacios, quien también quedó fuera del canal, a pesar de haberles advertido antes, en una carta, que despedir a Puertas significaría un ‘suicidio’ en aquella coyuntura política, porque perderían toda credibilidad.
2021: Diez años después, Cuarto Poder se queda otra vez sin equipo periodístico. Algo que se venía venir desde que despidieron a Clara Elvira Ospina del mismo cargo del que diez años atrás habían despedido a Laura Puertas, o quizás antes, cuando, sorpresivamente, sacaron de la conducción a Augusto Throndike y Sol Carreño, sin explicación alguna. Algo se había roto una vez más y los periodistas resistieron todo lo que pudieron, hasta que Gilberto Hume asumió el cargo de director periodístico del canal en plena segunda vuelta, para comandar la nueva línea informativa que era de apoyo total a Fuerza Popular.
En un comunicado a la opinión pública, los ocho periodistas renunciantes del mencionado programa (Gabriela García, Carlos Mauriola, Anuska Buenaluque, Daniel Yovera, Carlos Hidalgo, David Gómez Fernandini, René Gastelumendi y Karina Borrero), aseguran que tomaron la decisión hace varios días después de no recibir ninguna respuesta a las dos cartas en las que “detallamos los sucesos que colisionaban con los principios rectores de la institución, el derecho a la información y la ética periodística, los que defendimos hasta el último día”, aunque agregan que la decisión, de dar un paso al costado “fue aceptada por la empresa de común acuerdo con nosotros”.
También expresaron su solidaridad con sus compañeros Carola Miranda y Carlos Fonseca, directora del Noticiero América Noticias Edición Central y productor general de Canal N, respectivamente, quienes fueron despedidos por una carta que enviaron al directorio, alertarando sobre hechos que resultaban contrarios a la pluralidad periodística en la última etapa de la campaña electoral.
Lo dije antes y lo repito ahora: piensen bien antes de repetir como loros las frases: “prensa basura”, “prensa comprada”, “prensa mermelera”, sin diferenciar lo que es la prensa de lo que son los medios. Nadie sabe las batallas que los periodistas libran en sus propios medios para poder hacer un trabajo digno y aún así, son ellos los que reciben las pedradas.