Este jueves 14 de julio, falleció a la edad de 100 años el ex mandatario peruano Francisco Morales Bermúdez Cerrutti.
Después de ocupar varios cargos en el gobierno revolucionario encabezado por Juan Velasco Alvarado, Francisco Morales Bermúdez ocupó el cargo de comandante general del Ejército y el 29 de agosto de 1975 encabezó, desde el sur del país, lo que se conoce como el “Tacnazo”.

Desde ahí lanzó un manifiesto abierto, el cual estaba respaldado por los jefes de todas las regiones militares, por la Marina de Guerra, la Fuerza Aérea y las Fuerzas Policiales. Su propósito fue “eliminar los personalismos y las desviaciones” que el proceso revolucionario habría sufrido.
Desde la presidencia, Francisco Morales Bermúdez organizó la transición hacia la democracia. Convocó a una Asamblea Constituyente que se instaló en julio de 1978 y promulgó la nueva Constitución en julio de 1979. Y en 1980, el Perú celebró por primera vez en 12 años elecciones democráticas.

En 1985, Francisco Morales Bermúdez fue candidato presidencial del partido Frente Democrático de Unidad Nacional, que el mismo había fundado y que disolvió después de una votación insignificante.
Hasta el final de sus días, el general Morales Bermúdez estuvo acusado por crímenes de lesa humanidad, tanto por la justicia de Italia y Argentina. Se le acusó de la desaparición de personas a razón del Plan Cóndor, que durante la década de los 70 y 80 buscaba silenciar a personas opositoras a las dictaduras en América Latina. Inclusive a los 96 años fue condenado a cadena perpetua por un tribunal en Roma. A pesar de que esta condena fue ratificada en el 2019, Morales Bermúdez nunca fue extraditado y vivió en libertad hasta el día de su muerte, a los 100 años.

El gobierno de Pedro Castillo declaró, el sábado 16 de julio, duelo nacional y le otorgó las honras fúnebres.
Francisco Morales Bermúdez nació en Lima, el 4 de octubre en 1921, y estudió con los jesuitas en el Colegio Inmaculada. Después ingresó a la Escuela Militar de Chorrillos y al graduarse, en 1943, fue premiado con la Espada de Honor tras destacar en sus estudios de ingeniería.
